jueves, 21 diciembre 2023

Es posible que el número de muertes en Gaza sea aún mayor

Mientras la cifra oficial de muertos en Gaza supera las 20.000, Islamic Relief advierte que es probable que el número real sea aún mayor, ya que miles de personas siguen desaparecidas y enterradas bajo los escombros y cada vez hay más niños pequeños que pasan hambre y sufren enfermedades severas.

Ver morir a 20.000 personas en tan poco tiempo es una mancha en la conciencia del mundo. Las miles de personas asesinadas no son sólo estadísticas: son trabajadores humanitarios, médicos, enfermeras, profesores, periodistas, agricultores,comerciantes, artistas, trabajadores y personas de todos los sectores de la sociedad palestina. La gran mayoría de los muertos y heridos son civiles, el 40% de ellos niños. Los familiares del personal de Islamic Relief también han sido asesinados en sus hogares o mientras huían tras recibir órdenes de Israel.

Como organización humanitaria, Islamic Relief responde a guerras y terribles crisis en todo el mundo, pero rara vez, o nunca, hemos sido testigos de matanzas y destrucción a esta velocidad y escala.

La ley se ignora deliberadamente a diario. Dado que el número de muertos sigue aumentando cada hora, el Consejo de Seguridad de la ONU debe exigir un alto el fuego inmediato. Cada día más de retraso supone la pérdida de muchas más vidas. Sólo un alto el fuego inmediato y duradero puede proteger a los civiles y permitiría comenzar a abordar la catastrófica situación humanitaria.

Más de 10 semanas de implacable ataque israelí han arrasado gran parte de Gaza y han dejado a los civiles buscando desesperadamente alimentos, agua, medicinas y combustible. La mayoría de la gente pasa ahora días enteros sin comida y la mayoría de los civiles sufren hambre extrema. Cientos de miles de personas están hacinadas en refugios improvisados, y las fuertes lluvias y la caída de las temperaturas están empeorando aún más las condiciones, ya que las tiendas de campaña se han inundado y los niños enferman rápidamente.

 A pesar de que un pequeño número de camiones de ayuda humanitaria entran ahora a través de Kerem Shalom y Rafah, esta ayuda sigue siendo una gota en el océano en comparación con lo que se necesita. Ahora que los mercados están casi vacíos, Israel continúa prohibiendo la entrada de camiones comerciales. La ayuda humanitaria por sí sola no será suficiente para abordar esta crisis y es esencial que también se reabran los cruces a los suministros comerciales.

Además de los más de 20.000 muertos, más de 52.000 personas también han resultado heridas, y muchas de ellas han sufrido lesiones que les cambiarán la vida para siempre, como la pérdida de extremidades.

Los intensos bombardeos y ataques terrestres israelíes continúan a pesar de la creciente presión global para un alto el fuego. En los últimos días se han asediado más hospitales y se han bombardeado casas, campos de refugiados y refugios escolares.

Las telecomunicaciones y el internet siguen cortados en gran parte de Gaza desde hace días, lo que restringe la información y dificulta aún más la entrega de ayuda. Hay numerosos informes sobre civiles detenidos y maltratados.

Los lugares de culto han sido objeto de ataques sin precedentes, y al menos 112 mezquitas y tres iglesias han resultado dañadas por los bombardeos, incluidas muchas que albergan a familias que se han visto obligadas a abandonar sus hogares.

 La escala de la destrucción es terrible: al menos el 60% de los hogares y el 69% de las escuelas están ahora dañados o destruidos, y casi el 80% de los hospitales ya no pueden funcionar.

La necesidad de un alto el fuego humanitario permanente es mayor que nunca.

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