A través de los desafíos enfrentados y las bendiciones recibidas durante este mes sagrado, te contamos cómo la generosidad y el apoyo de organizaciones como Islamic Relief han tenido un impacto significativo en las vidas de Ali y su familia.
“Todos los días me levanto temprano para comenzar mi trabajo como limpiador de ventanas. Soy el único sostén económico de mi familia, por eso tengo que mantenerme firme y ser constante,” dice Ali con sinceridad. “Aunque mi trayecto diario para comprar herramientas de limpieza es largo y agotador, nunca me desanimo. Mi familia depende de mí, por eso debo hacer todo lo que pueda para garantizar su bienestar”.
“Durante el Ramadán, los desafíos aumentan”, explica Ali con un suspiro. “Es difícil conseguir alimentos nutritivos para mi familia. Con recursos limitados, a menudo dependemos de comidas sencillas como el cuello de pollo para complementar nuestra dieta. El agua salada nos obliga a buscar ayuda de los vecinos para conseguir agua dulce, otro obstáculo que debemos superar todos los días”.
“Sin embargo, las cosas cambiaron cuando recibí un paquete de alimentos de Ramadán de parte de Islamic Relief”, dice Ali agradecido. “Por primera vez, mi familia y yo tuvimos acceso a una variedad de alimentos esenciales. Esto nos permitió disfrutar de comidas nutritivas y dulces tradicionales durante el Iftar, lo que trajo alegría y sosiego a nuestros corazones”.
“El impacto de los paquetes de alimentos va más allá del simple sustento”, continúa emocionado Ali. “Han fomentado un sentido de comunidad y solidaridad entre las personas más necesitadas. La generosidad de Islamic Relief ha marcado una diferencia significativa en mi vida y la de mi familia”.
Al igual que años anteriores durante Ramadán, este año Islamic Relief también se compromete a actuar como un salvavidas para las personas que más lo necesitan mediante la distribución global de paquetes de alimentos.
Con tan solo 80 euros puedes donar un paquete de alimentos para apoyar a familias como la de Ali durante Ramadán. Dona ahora por un Ramadán sin hambre.