A sus 12 años, Mostafa siempre ha tenido una mente brillante para las matemáticas. Pero hoy, sus cálculos no giran en torno a ecuaciones abstractas, sino a la cruda aritmética de la supervivencia. Cada día, arriesga su vida en una misión vital: recoger el agua que mantiene con vida a su familia.
Criado por su madre en Gaza; el lugar más difícil del mundo para ser un niño, Mostafa perdió a su padre hace once años. Ahora, junto a sus cuatro hermanos, su infancia se ha transformado en un sistema riguroso: buscar agua, cocinar, recolectar leña y, si la suerte acompaña, conseguir una ración de comida en una cocina benéfica cercana. En esta lucha diaria por la existencia, cada niño tiene un papel ineludible para que la familia pueda subsistir.
Una Lucha Sin Tregua: Cinco Desplazamientos en Dos Años
La lucha de Mostafa y su familia no es solo por el sustento, sino contra la constante amenaza del desarraigo. En los últimos dos años, han sido desplazados forzosamente hasta en cinco ocasiones. El primer impacto fue devastador: su hogar familiar quedó reducido a escombros por misiles, obligándolos a huir de inmediato y sin pertenencias.
Su refugio actual es el reflejo de esta precariedad. Tras dormir a la intemperie, lograron erigir una tienda improvisada y frágil. Este techo desgastado ofrece ningún alivio ante las duras condiciones climáticas, ya sea el frío y la lluvia penetrante del invierno o el calor sofocante del verano.
La insalubridad se suma a la miseria: deben lidiar con infestaciones de roedores e insectos mientras se esfuerzan por asegurar la ración diaria de comida y agua.
El Testimonio de Amna, la Madre:
La voz de Amna, madre de Mostafa, resuena con desesperación: “No tengo harina, ni siquiera leña para cocinar para mis hijos. He dejado de dormir por las noches debido a la preocupación constante. Soy madre y padre a la vez. Tengo que hacerlo todo yo misma.”
La familia fue reubicada en una zona remota donde la educación ha quedado en pausa. Mostafa y sus hermanos no tienen acceso a internet ni a la escuela. Cada día es una repetición agotadora: una lucha sin fin por la supervivencia.
Un Salvavidas para Millones: La Crisis Generalizada en Gaza
La terrible situación de la familia de Mostafa no es un caso aislado. Es un reflejo de la realidad de miles de huérfanos y familias desplazadas que enfrentan circunstancias idénticas en Gaza. Las condiciones de vida son extremas y la escasez de recursos esenciales no solo compromete su presente, sino que también amenaza irreversiblemente su futuro.
Mostafa y su familia dependen desesperadamente de la ayuda humanitaria. Lamentablemente, esta asistencia es insuficiente en toda la Franja debido al continuo asedio ilegal. Esta restricción provoca una escasez crítica de alimentos, agua, medicinas y otros recursos vitales, poniendo en peligro la vida de incontables civiles. Tu apoyo es crucial para ser el salvavidas que estos niños necesitan.
¿Cuántos niños han sido asesinados en Gaza?
Lamentablemente, se calcula que más de 20.100 niños han fallecido en Gaza desde octubre de 2023, y decenas de miles han quedado huérfanos. Estos niños luchan ahora por sobrevivir sin el afecto y cuidado de uno o ambos padres.
Apadrina a un huérfano en Palestina hoy
Mostafa forma parte de los 21.000 niños a los que Islamic Relief apoya en Palestina a través de nuestro Programa de Apadrinamiento de Niños Huérfanos. Mostafa y su familia reciben ayuda económica regular para comprar lo que necesitan, siempre que los productos estén disponibles.
Nuestro programa de apadrinamiento es actualmente una de las pocas formas de llevar apoyo real a las familias palestinas que sufren.
Hay más de 7.300 huérfanos en nuestro sistema esperando a ser apadrinados. Sé un salvavidas para los niños huérfanos de Gaza. Por favor, dona hoy: los niños palestinos necesitan tu ayuda ahora.