[Ciudad de Gaza, 12 de septiembre de 2025] — 45 organizaciones humanitarias y de la sociedad civil advierten de que la ofensiva de Israel contra la Ciudad de Gaza equivale a una sentencia de muerte.
La intensificación de los ataques militares israelíes contra la Ciudad de Gaza y las órdenes de desplazamiento forzoso para toda la ciudad están dejando a las familias ante un dilema imposible: huir y arriesgarse a morir en el camino y en las zonas de desplazamiento superpobladas, o quedarse y afrontar los bombardeos incesantes en sus refugios. El hambre y el asedio les esperan de todas formas.
«Nuestra única exigencia es la vida», dijo Ayman (nombre modificado), un padre refugiado con su familia en la Ciudad de Gaza. «Somos humanos como vosotros. Queremos vivir con dignidad y seguridad, no morir de hambre o por las bombas».
Casi un millón de palestinos, hambrientos, en duelo y desplazados en repetidas ocasiones, permanecen en la Ciudad de Gaza. Si la operación de Israel en la Ciudad de Gaza continúa, los hospitales serán aislados y atacados, los refugios y las escuelas bombardeados, los convoyes de ayuda bloqueados y aquellos demasiado débiles, ancianos o enfermos para huir serán abandonados a su suerte. «Estamos cansados de correr de un sitio a otro», dijo Abeer (nombre modificado), una trabajadora humanitaria.
Al mismo tiempo, Israel está obstruyendo deliberadamente las operaciones humanitarias. Se sigue denegando la entrada a los camiones de ayuda, y las ONG internacionales se encuentran en el limbo debido a un régimen de registro opaco, incluso a medida que la hambruna se agudiza.
La Corte Internacional de Justicia ha reconocido que los palestinos en Gaza tienen derecho a ser protegidos del genocidio. Cada acto de desplazamiento forzoso y cada acto que intensifica la hambruna hacen que ese peligro sea más certero, y el mundo no puede alegar que no lo vio venir.
Dejad entrar nuestros bienes. Dejadnos trabajar. Detened esta ofensiva.