Yusuf Omar Osman tiene 55 años y vive en la aldea de War Imran de la región de Togdher. Yusuf es padre de siete hijos y ha sido un anciano de la comunidad durante los últimos nueve años. Nació en este pueblo y ha pasado toda su vida aquí. Yusuf nos contó sobre la sequía a la que la comunidad ha tenido que hacer frente desde hace dos años.
Yusuf mencionó que la vida es cada día más difícil y la sequía se está volviendo muy grave y que es una de las peores que ha presenciado. En nuestra entrevista con él, le pedimos a Yusuf que nos contara la historia de este pueblo y cómo la sequía ha afectado a su comunidad. Comienza su historia diciendo lo siguiente.
«Este pueblo ha pasado por muchos momentos difíciles, pero creo que después de la guerra civil, la sequía actual está siendo lo más difícil», dijo Yusuf.
«En el pasado, las sequías recibieron diferentes nombres, por ejemplo, Dabadheer en 1974, Dibijale en 1984 y Dhuumato en 1996. Como puede ver, todas estas sequías tuvieron lugar en diferentes momentos y hubo un intervalo de siete o nueve años entre ellas, pero ahora todo está conectado a partir de 2016», dijo Yusuf, «Dado que la situación es así, muchas personas han huido de la aldea y se han ido a diferentes lugares. El diez por ciento de las personas en este pueblo se han ido a diferentes lugares en busca de una vida mejor con sus animales, o en busca de agua y comida. El pueblo está lleno de casas que han sido abandonadas y tapiadas. Este es el efecto de esta severa sequía«.
«Mi familia está sufriendo esta grave sequía, y ahora viven a 10 km de la aldea. No sé qué hacer y no he recibido ninguna ayuda de nadie hasta ahora», agregó Yusuf. «La muerte de animales comenzó en junio y, un gran número de camellos, ovejas y cabras han muerto. ¡Solo yo he perdido 70 animales en los últimos tres meses! El agua es cara y el número de personas que pueden pagar por ella es muy pequeño», dijo Yusuf.
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